Recursos de oración para tu peregrinación
Hacer una peregrinación eucarística?
Una peregrinación es "el movimiento simultáneo de los pies y el alma", un viaje que se realiza tanto externa como internamente. El peregrino viaja a un lugar de importancia espiritual, saliendo de sí mismo para encontrarse con Dios en los lugares donde Él se ha revelado. Esta acción refleja el viaje interior del peregrino, que utiliza esta experiencia para acercarse más a Nuestro Señor y buscarle más intencionadamente.
Cuando Jesús nos dio el don de la Eucaristía, nos dio una nueva forma de caminar a su lado. El catolicismo tiene ahora una vibrante historia de procesiones eucarísticas. En esta tradición, la Eucaristía es llevada por las calles, acompañada por los fieles. Caminamos públicamente con Nuestro Señor para que otros puedan encontrarlo personalmente, como lo hicieron hace 2.000 años.
Peregrinación Eucarística Nacional es una iniciativa verdaderamente única. Es algo NUEVO, una hermosa fusión del camino HACIA Jesús y del camino CON Jesús. Y lo que es más, es una aventura que todos los católicos pueden hacer juntos, ya sea por disposición interior o por acompañamiento físico.
Adaptado del sitio web de la Peregrinación Eucarística Nacional: https://es.eucharisticpilgrimage.org/why-join-us
Tarjeta de instrucciones para la Adoración Eucarística (descargar)
Tarjeta de instrucciones para el Sacramento de la Reconciliación (descargar)
Aprovecha la oportunidad de obtener una indulgencia plenaria
El Papa Francisco emitió una indulgencia plenaria a todos aquellos que participen en la Peregrinación Eucarística Nacional. Si la gracia de Dios es derramada sobre nosotros como lluvia, obtener una indulgencia es como obtener un balde para recoger más lluvia.
El Catecismo de la Iglesia Católica, citando al Papa San Pablo VI, explica que: “la indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un cristiano fiel y dispuesto, cumpliendo determinadas condiciones, obtiene mediante la acción de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, dispensa y aplica con plena autoridad el tesoro de los méritos de Cristo y de los santos”. (1471)
¿Qué significa eso? Es como si cada vez que pecamos, claváramos un clavo en el tronco de un árbol. Cuando recibimos el perdón de Dios en el Sacramento de la Reconciliación, Jesús retira los clavos. Sin embargo, quedan los agujeros. La penitencia repara los agujeros que dejan los clavos.
La Iglesia ofrece una indulgencia, como una manera de recibir la gracia de Dios, para reparar los agujeros, ya sea para uno mismo o para alguien que murió antes de que sus agujeros fueran reparados. Obtén más información acerca de las enseñanzas de la Iglesia sobre las indulgencias en los párrafos 1471 al 1479 del Catecismo.
¿Cómo se obtiene esta indulgencia?
Todo católico bautizado podrá obtener una indulgencia plenaria una vez al día siempre y cuando cumpla las condiciones designadas por la Iglesia. En este caso:
• Estar en estado de gracia (no tener pecados graves no confesados y no estar formalmente separado de la Iglesia)
• Tener la disposición interior de desprendimiento completo del pecado
• Recibir el Sacramento de la Reconciliación
• Recibir la Santa Comunión
• Orar por las intenciones del Santo Padre (se recomienda rezar un Padre Nuestro y un Ave María)
• Participar en la Peregrinación Eucarística Nacional, en cualquiera de nuestras misas de la mañana, procesiones o noches de encuentro
Si falta alguna de estas condiciones, se convierte en una indulgencia parcial y repara parcialmente nuestros pecados.